Un buen trozo de natilla de arequipe, acompañado de unos buñuelos, es uno de los manjares que los colombianos disfrutamos en época de Navidad. La natilla se sirve en las Novenas que van del 16 al 24 de diciembre, siendo el momento más esperado por adultos y niños, después del canto de los villancicos.
La natilla puede hacerse de manera tradicional, usando la canela y el azúcar como principales aportantes de sabor. O también puede elaborarse como en esta ocasión, teniendo al arequipe o dulce de leche, como protagonista de la receta.
Hay quienes le agregan coco rallado, clavos de olor o uvas pasas; es cuestión de gustos y por supuesto, son otras ricas opciones para salir de lo tradicional cada diciembre.
Mi favorita sin embargo, es la natilla de arequipe. La preparo disolviendo fécula de maíz con un poco de leche y luego agregando la mezcla, a una olla con azúcar, arequipe, leche, mantequilla y canela.
El aroma que se desprende al prepararla llamará a todos los miembros de la familia a la cocina. Vas a ver que en cuestión de segundos llegarán, cuchara en mano, varios voluntarios ofreciéndose a “raspar” la olla en la que se cocinó.
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